Hotel La Venteta

Al interior se accede a través de un hermoso patio con una interesante colección de tinajas antiguas de barro como elemento decorativo. Cruzando el portón de madera, llegamos al interior de la posada, de techos altos, vigas de madera y gruesos muros blancos.

Cada uno de los dormitorios, salones y estancias del hotel, está decorado con personalidad propia gracias a la acertada combinación de piezas de anticuario, mueble rústico francés y lámparas de cristal, que junto a la recuperación de elementos ya existentes, nos hacen disfrutar de un alojamiento rural discreto y elegante lleno de encanto.

En el exterior se puede disfrutar de sus patios cuajados de plantas, escuchar el gorjeo del agua de sus fuentes, de la magnífica piscina y de los jardines con palmeras, naranjos y olivos que entremezclan sus matices ocres y verdes con las coloristas buganvillas.